En Chile en la Novena Región, el 70 % de los basurales comunales de Municipalidades (más de 20) se ubican en comunidades Mapuche.
El 100 % de plantas químicas de aguas servidas se ubican en tierras mapuche.
Más de 1.500.000 hectáreas de plantaciones de especies exóticas, de monocultivo industrial entre la Novena y Décima Región (de un total de 2.500.000) se ubican en el territorio histórico Mapuche y se intenta instalar una serie de celulosas, incluyendo un proyecto hacia el mar.
La Central Hidroeléctrica más grande de Chile en la Región del Bio Bio afectó a más de 3.500 hectáreas del territorio Mapuche pewenche, causando el exterminio de su vida comunitaria.
Existen intentos de ejecutar 3 proyectos de hidroeléctricas en territorio mapuche wenteche y pewenche en los límites de la Región de la Araucanía y de Los Lagos.
La privatización de parques nacionales, espacios esenciales de equilibrio de las comunidades precordilleranas y cordilleranas, ha involucrado y puede involucrar impactos al territorio y recursos naturales de numerosas comunidades mapuche.
Esta situación, transgrede diversas normas de Derecho internacional que versan en la materia (medio ambiente, pueblos indígenas y racismo) y que son varias las reconocidas por el Estado chileno. Como ejemplo: La Declaración de Río de Janeiro sobre Medio Ambiente y Desarrollo (en particular el principio 22), el Programa de Acción sobre Desarrollo Sostenible (en particular, capitulos 11 y 26), El Convenio sobre Diversidad Biológica ( en particular, articulos 8j y artículos conexos), la Convención Internacional para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial, El Convenio 169 de la OIT sobre Pueblos Indígenas y otros instrumentos principios y programas de las Naciones Unidas y de sus agencias especializadas.
En relación al derecho a ser consultados en todos los asuntos que conciernen; el derecho al consentimiento previo e informado, el derecho a que las opiniones y decisiones sean respetadas, contempladas en el Derecho internacional en asuntos indígenas y señalado en la Ley chilena para Indígenas Nº 19.253, artículo 34º, inciso 1º, nunca han sido considerados para las comunidades afectadas en ningún conflicto. Por el contrario, las comunidades mapuche han debido soportar las políticas de imposición y divisionismo.
Sin entramparse en análisis romanticistas o fundamentalistas, es un hecho que para las Comunidades, como parte de la cosmovisión del Pueblo Mapuche, su relación con el entorno territorial es de un equilibrio entre las fuerzas de la naturaleza y su forma de vida. La existencia de estos proyectos en tierras Mapuches trae graves consecuencias a esto, con irreparables daños a la cultura territorial. Los mismo afectados se han referido a su territorialidad no como un pedazo de suelo, sino a espacios que tienen sus propias fuerzas (gnen) en la tierra, ríos, esteros, bosques, animales, personas, las que se interrelacionan entre si y permite un equilibro. Sin embargo, estas fuerzas desaparecen por la transgresión y contaminación de los ecosistemas como consecuencia de estos proyectos y mega proyectos. La violación y contaminación de menokos (pantanos), árboles como el Foye (canelo), plantas medicinales y espacios sagrados donde habitan los antepasados (cementerios y gillatuwe), trae graves desequilibrios por la ruptura de los elementos de la territorialidad.
A pesar de los esfuerzos del movimiento social Mapuche y de diversas instancias de derechos humanos, sociales y ambientales a nivel local e internacional, la situación de los derechos socio y ambientales y fundamentales en Chile sigue siendo crítica.
No hay en el país avances en el reconocimiento legal de los derechos internacionalmente reconocidos a los Pueblos originarios; la implementación de proyectos de inversión en áreas Mapuche sigue adelante no obstante la oposición de las comunidades. Los conflictos que esta situación genera han sido duramente contestados desde el estado, el que ha reprimido a líderes y activistas e impulsado una persecución judicial, lo que ha resultado en la “criminalización” de un conflicto de naturaleza política y territorial.
Al respecto, Konapewman y el informativo Mapuexpress elaboró y compiló para CITEM (coordinación De identidades territoriales Mapuche), un informe el que fue presentado en marzo del año pasado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, en el marco de una audiencia concedida el día 3 de dicho mes.
En efecto, RADA con un campo de acción en la Región de la Araucanía y ahora, la emergente RED eco territorial de los Pueblos, con enlaces en diversos lugares de Chile, instancia donde se agrupan varias de estas organizaciones, señalan: … “Los derechos de los pueblos en Chile están siendo vulnerados permanentemente. Los conflictos socioambientales se dan a lo largo y ancho del territorio y la clase gobernante no han mostrado voluntad de superarlos. Los ejemplos son muchos, pero no nos quedamos en la denuncia. Exigimos el respeto de los derechos de los pueblos originarios y criollos a controlar sus recursos. Pero no esperaremos a que la hagan por nosotros... ¡Comenzamos nosotros mismos la construcción de La Alternativa!”…
Cabe mencionar, que este 28 de octubre de 2006 surgirá la iniciativa de más de 80 organizaciones sociales y ambientales que a fines de julio, en un encuentro de Justicia Socio Ambiental en Temuco, fijaron este sábado como día de movilización general contra el saqueo de los grupos económicos, las transnacionales y los partidos.
Recuperar la autodeterminación, la confianza, los espacios, la memoria, la creatividad, la expresión, la fiesta de encontrarse y trabajar en conjunto, son parte de las expresiones para esta fecha que surgen cada vez con más fuerza.
Por Alfredo Seguel
(Konapewman)
www.mapuexpress.net
Las mujeres Mapuche no tenemos la misma concepción de nuestra creación que el resto de las mujeres. No somos el soplo de la costilla de un hombre, ni la que ayuda a este a caer en tentación. Por cosmovisión fuimos creados por ELCHEN (creador), materializado en un padre y una madre antiguos que habitan en el Wenu Mapu (la tierra de arriba). Fuimos creados opuestos y complementarios a nuestra pareja ( Wentrü), distintos pero necesarios para generar la vida y mantenerla.
Por siempre y desde siempre la mujer ha sido fundamental en la transmisión de la cultura. Es el equilibrio que contrasta con la destrucción del hombre winka.
